Todas las noches nos despedíamos igual.
Tres besos.
– Mua, Mua y Requetemua.
Seguidos de tres frases, que yo empezaba y ella completaba:
Hasta mañana…………….. si Dios quiere.
Hasta mañana……………..si la suerte nos acompaña.
Hasta mañana……………. si el tiempo lo permite.
Una despedida repetida cientos, miles de veces.
Una despedida repetida hasta el último día, hasta el último momento, hasta el último suspiro.
Una despedida que sigo repitiendo todas las noches.
Y que sigo repitiendo, aunque Dios no haya querido, la suerte no haya acompañado, y el tiempo no lo haya permitido.
Buenas noches Mamá, hasta mañana………………
Deja una respuesta